Existen diversas opciones para viajar a Egipto, ya que hay buenas conexiones entre El Cairo y muchas ciudades europeas. Puede resultar más económico contratar un paquete de vacaciones que comprar sólo el billete de avión y, en caso de que los hoteles no sean lo esperado, no es obligatorio instalarse en ellos. Hacer un vuelo directo desde otros destinos puede llegar a ser caro, por lo que es aconsejable volar primero a Europa y, desde allí, a Egipto.
La línea aérea nacional egipcia es EgyptAir; la compañía Air Sinai también dispone de buenas conexiones dentro del país. La mayoría de los viajeros llegan a Egipto a través de El Cairo, aunque últimamente está aumentando el número de desembarcos en Alejandría, Luxor, Asuán, Hurghada (Al-Ghardaka) y Sharm el-Sheij. En estos aeropuertos, operan una serie de empresas más pequeñas, además de compañías de vuelos chárter con conexiones directas con Europa.
Para desplazarse desde otras zonas de África y Oriente Próximo, puede utilizarse el autobús que parte de Israel y atraviesa el golfo de Aqaba o el extremo sur de la franja de Gaza y los ferrys que zarpan desde Jordania, Arabia Saudita y Kuwait.