La India dispone de un registro tan amplio de factores climáticos que es imposible señalar con exactitud el mejor momento para visitarla. En general, los meses más agradables en gran parte del territorio son de octubre a marzo. En el extremo meridional, la época más recomendable suele ser de enero a septiembre, por las pautas climáticas que imponen los monzones, mientras que Sikkim y las regiones más al noreste resultan más placenteras entre marzo y agosto. Cachemira y las zonas montañosas de Himachal Pradesh son más accesibles entre mayo y septiembre. Los desiertos del Rajastán y la región himalaya de la India, al noroeste, se encuentran en su mejor momento durante los monzones.
La temporada de senderismo en el Himalaya indio se extiende aproximadamente de abril a noviembre, aunque puede variar mucho según el trayecto, la altitud y la región concreta. La época de esquí transcurre de enero a marzo.