Islandia se está convirtiendo en uno de los destinos europeos favoritos. Su popularidad se debe, en gran parte, a sus accidentes naturales: glaciares, fuentes termales, géiseres, volcanes en actividad, altas cimas y extensos desiertos de lava. Además de la diversidad de su paisaje, posee una historia, literatura y tradición folclórica muy ricas. Su único inconveniente recae en sus precios: los más elevados de Europa. Aunque es factible viajar con poco dinero, los viajeros preocupados por su presupuesto deberán acampar en diversas ocasiones si pretenden conocer el país a fondo.