Moneda
yen
Comidas
· Presupuesto bajo: entre 550 y 880 yenes
· Presupuesto medio: entre 880 y 2700 yenes
· Presupuesto alto: a partir de 2700 yenes
Alojamiento
· Presupuesto bajo: entre 2800 y 3850 yenes
· Presupuesto medio: entre 3850 y 7700 yenes
· Presupuesto alto: a partir de 7700 yenes
A la hora de viajar, quizá Japón destaque como el país más caro del mundo, pero siempre se pueden nivelar los gastos a un baremo prácticamente asequible. El presupuesto diario más exiguo, suponiendo que el visitante se aloje en los hoteles más económicos, coma con moderación y cubra distancias cortas, se elevaría a unos 60 dólares (69 euros). A ello habría que añadir unos 10 dólares (11,5 euros) para ciertos caprichos como tentempiés, bebidas, entradas y actividades lúdicas. Alojarse en un bed & breackfast (u hostales) de estilo japonés o en hoteles para hombres de negocios, y frecuentar restaurantes caros, puede disparar fácilmente los gastos hasta los 100 dólares diarios. En Japón, los viajes de larga distancia suelen desbaratar el presupuesto; si se pretende viajar mucho en poco tiempo, merece la pena adquirir un abono de los Ferrocarriles Japoneses. En el extremo opuesto, quienes deseen gastar grandes cifras, no encontrarán ningún impedimento; Japón está especializado en cubrir las necesidades del ostentoso mundo de los negocios: cuanto más alta sea la cuenta, más aumenta el prestigio de los clientes.
El dinero en efectivo sigue imperando en Japón, aunque el uso de tarjetas de crédito esté bastante extendido en las grandes ciudades. El país goza de un índice de criminalidad muy bajo, por lo que es normal que lleven grandes cantidades de dinero para cumplir con el ritual sagrado de pagar en efectivo. Los visitantes extranjeros pueden imitar esta costumbre sin temor, pero adoptando las precauciones habituales. Las divisas o los cheques de viaje se pueden canjear en un banco autorizado para cambiar divisas o en las principales oficinas de correos y algunos de los hoteles y comercios más importantes. Son preferibles los dólares americanos; intentar cambiar moneda taiwanesa o coreana se revelará como un empeño inútil. La mayoría de cajeros automáticos no aceptan las tarjetas de crédito extranjeras. Se debe buscar el logo de Cirrus o Plus, o consultar con la oficina bancaria local antes de partir.
En Japón no se suele regatear ni dejar propina. Para demostrar su gratitud, es preferible un regalo que una gratificación económica. El regateo está prácticamente limitado a los grandes centros de productos electrónicos a precio reducido, donde si se solicita con educación, se puede obtener un descuento del 10%.