Existen muchas posibilidades de practicar el senderismo en la República Dominicana, especialmente en la cordillera Central. El viajero podrá realizar caminatas a lo largo de paisajes salvajes en los parques nacionales del país, y también explorar sus kilómetros y kilómetros de playas vírgenes. También resulta factible encontrarse emplazamientos excelentes para el surf, en especial a lo largo de las costas norte y este. Algunos de los mejores enclaves se hallan al oeste de Sosúa, y también al sur de la bahía de Samaná.
El buceo se erige como otro de los deportes más populares en el país, y muchos de los hoteles incluyen en sus paquetes turísticos clases y diplomas. Aunque perduran algunas zonas espléndidas para la inmersión y embarcaciones naufragadas que explorar en la costa norte, el agua en la costa sur se mantiene más cálida y sus arrecifes de coral, algo más protegidos. Barahona y Cabo Rojo, cerca de Pedernales, resultan dos lugares muy atractivos para practicar el submarinismo.
La bicicleta se cuenta como un excelente medio de transporte para disfrutar del esplendor natural del país. Se pueden encontrar establecimientos que las alquilan en las principales urbes, aunque es preferible que cada uno haya incluido la suya en su equipaje.
La bahía de Samaná se ha convertido, desde hace muchos millones de años, en el enclave preferido por los rorcuales para su apareamiento. Existen varias empresas de naves que ofrecen viajes de observación de ballenas en la época de celo.