Cómo llegar a Suiza

Los principales puntos de entrada de los vuelos internacionales son Zurich y Ginebra, aunque Basilea, Berna y Lugano también reciben algunos. Los aeropuertos no cobran tasa de salida. El ferrocarril constituye un modo estupendo para viajar al país; gracias a los abonos europeos, los viajes en tren resultan muy accesibles. Los autobuses son algo más lentos y menos confortables, aunque en ocasiones resultan más baratos. Dirigirse a Suiza por carretera resulta sencillo, pues está comunicada por autopistas rápidas y en perfectas condiciones desde todos los países vecinos. El viajero que disponga de tiempo y dinero puede desplazarse a la Confederación Helvética en barco a través del Rin, partiendo de Amsterdam. También es posible acceder mediante los transbordadores de vapor desde Alemania (a través del lago de Constanza), Italia (por el lago Mayor) y Francia (a través del lago Léman).