Bolivia, la república latinoamericana más aislada y de mayor altitud, un país sin salida al mar, es el Tíbet de las Américas. Es también el más indígena del continente; más del 50% de la población conserva los valores y creencias tradicionales. Aunque Bolivia sea uno de los países más pobres de Suramérica, su riqueza cultural, sus extraordinarios paisajes andinos y los restos de antiguas y misteriosas civilizaciones lo convierten en el destino más prometedor y apasionante para los viajeros independientes y de espíritu aventurero.